Después de la Copa Mundial de Qatar, Arabia Saudita introdujo una política innovadora que permite a los residentes del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) obtener visas de turista. Esta política ha generado una ola de oportunidades y cambios en la forma en que los expatriados del Golfo viajan dentro de la región. Este artículo profundiza en los detalles de este desarrollo, destacando su impacto y el panorama cambiante de los viajes en el Golfo.
La Copa Mundial de Qatar sirvió como chispa que encendió la transformación de los viajes regionales. Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos dieron la bienvenida a los poseedores de entradas con entrada sin visa, lo que llevó a los aficionados de Omán, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Bahrein a aventurarse en los países vecinos tanto para el espectáculo de fútbol como para otras actividades de ocio, incluidas las peregrinaciones.
En el centro de este cambio está la introducción por parte de Arabia Saudita de una visa de entrada múltiple. Esta visa permite a los residentes del CCG con " buenas profesiones " visitar el reino varias veces en un período de 90 días. Esta iniciativa ha hecho que sea considerablemente más fácil para los expatriados del Golfo explorar Arabia Saudita y sus diversas atracciones.
Tradicionalmente, Arabia Saudita atraía principalmente a peregrinos religiosos, y los viajeros tenían reservas debido a preocupaciones sobre la inmigración en los aeropuertos y la policía religiosa, conocida como mutawa. Sin embargo, la introducción de estas nuevas políticas de visas sauditas ha llevado a una transformación en la percepción de Arabia Saudita como destino de viaje.
Los expatriados de los países del CCG se embarcan cada vez más en escapadas de fin de semana a Arabia Saudita. Esta tendencia refleja la evolución de los estilos de vida y una mejor percepción del ingreso disponible entre los residentes de la región.
El costo de estos viajes puede variar significativamente según varios factores. Las familias, por ejemplo, pueden gastar más en alojamiento, mientras que los grupos exclusivos de hombres suelen optar por opciones más económicas. Estas variaciones han contribuido a la diversidad de experiencias que ofrece Arabia Saudita.
Si bien las nuevas políticas de visas han brindado una nueva facilidad para viajar, algunos solicitantes enfrentan desafíos. Las discrepancias entre los estatus profesionales enumerados en las visas de residente y la lista de profesiones elegibles de Arabia Saudita pueden provocar retrasos o rechazos de visas.
La tendencia de viajar se extiende más allá de Arabia Saudita. Omán, con su belleza natural, sigue atrayendo a los amantes de la naturaleza. La autopista Rub-el-Khali recientemente inaugurada ha simplificado los viajes a Omán, eliminando la necesidad de pasar por los Emiratos Árabes Unidos. Jordania también se beneficia de una afluencia de turistas, mientras que Kuwait sigue siendo relativamente inaccesible debido a sus políticas de visas y la necesidad de decisiones gubernamentales estables.
La apertura de visas de turista a expatriados del Golfo por parte de Arabia Saudita ha desatado una ola de transformación en los viajes regionales. No sólo ha redefinido las percepciones de los viajes dentro de Medio Oriente, sino que también ha brindado a los residentes interesantes oportunidades para explorar los países vecinos. Este cambio está a punto de remodelar el panorama de viajes del Golfo en los próximos años.